Necedad con necio presente

"Aquel a quien no le gusta el vino, la mujer ni el canto, será un necio toda su vida."

Así se expresó Martín Lutero al momento de mantener la posición que erigió ante la santa sede católica en la que entre su discurso emitió; Yo no puedo someter mi fe ni al papa ni a los concilios, porque es tan claro como la luz del día que ellos han caído muchas veces en el error así como en muchas contradicciones consigo mismos. A parte de no ser digno de un cristiano hablar contra su conciencia.

Como todos sabemos, el personaje en referencia fue en (1483 - 1546) un teólogo alemán que ante la ruptura con la iglesia católica puso en marcha la Reforma protestante. Hoy conocida como la corriente de pensamiento cristiano luteranos, que desde ese entonces conservan la visión teológica; doctrina de justificación por fe y no por obras, como había sido expuesta con claridad por Lutero y más recientemente por muchos cristianos.


Lo que traigo a referencia, porque en estos tiempos presentes, como se puede apreciar en el resumen de los pasajes históricos luterano que señalo; no estamos lejos de encontrar esas contradicciones en los episodios humanos. Y lo resalto así, porque recientemente; a pesar de tener la paciencia y haber estado dedicado al trabajo de reducir la euforia y el odio que agudizó la controversia que generó la apropiación indebida contra la comunidad donde resido y denunciada ante los organismo oficiales competentes; la necedad de quienes sostienen una actitud maniquea para doblegar la posición que asumí en torno a ese caso, como es; hacer gestión para que se haga justicia; termina siendo la referencia presente de la necedad para pretender; que personalmente termine cabalgando sobre mi consciencia.

Por lo que busco en ese episodio personal, la semejanza con los hechos históricos resaltados y porque él es el ejercicio comparado para señalar; que a pesar del hecho histórico que se extrae como referencia y tantos otros que se podrían configurar; el aprendizaje en el proceso de desarrollo humano posee lagunas que pueden atenderse, dándose cuenta; que en gran parte, como he reseñado, la discusión por fe y no por obras, que en el siglo XIII – XIV se dio, la humanidad aun no lo ha logrado cerrar.

Lo que en síntesis, en forma causal, el ejemplo en el aspecto presente, personalmente me atañe, pero las consecuencias involucran a la humanidad, porque intrínsecamente el contenido ideológico abraza la razón que buscó el planteamiento luterano ante la santa sede católica, que regía el poder político religioso del momento histórico.

Pero obviamente, tal como en el tiempo de Lutero, por no poder acabar totalmente con la necedad, el gran Adversario había conseguido dividir la Palabra de Dios y hoy, ante la comparada historia presente que se reseña, paradójica e hipotéticamente el hecho se repite; el gran adversario consigue mantener la división.

Acércate al material audiovisual anexo, que con el se trata de ampliar el interés de enfocar el tema que presento. El mismo fue recomendado por quien en alianza mantenemos cruzada cooperación.

Así mismo, has clip en la palabra el Gran adversario para transportarte a datos que te indicarán quién es él

http://www.youtube.com/watch?v=PjkforkwWng

http://www.youtube.com/watch?v=R8p-418n5Wo