Irónico el análisis melancólico de la nueva Era.

jjejejejej Irónico el análisis melancólico de la nueva Era.

Esa inspiración de Gustavo Fernández que reenvías como eco de los asustados sentimientos impresos, resalta el esfuerzo vano de reconocer qué la vida es el proceso temporal de la evolución que la naturaleza contiene en todos sus elementos.

Con todas las imperfecciones que se superan en el recorrido hacia la integración natural, se converge en el camino de la unicidad global que constituye el todo, en la cual se forma el escenario ideal para la vida.

Todo momento circunstancial que promueve un episodio distinto, es la consecuencia del proceso evolutivo que contempla etapas y ciclos de desarrollo, en la cual no existe desperdicio. Todo lo que se hace presente termina siendo la base fundamental del episodio sub siguiente y en el universo se mantiene como eslabón de la cadena de evolución, como así ahora se conoce en el análisis del genoma humano con la nueva definición de los génes chatarra.

No transcurrimos, nos mantenemos en el espacio del tiempo en la cual nos manifestamos y por tanto permanecemos intacto en ese momento, lo que sigue es el siguiente episodio de la vida, en la cual se contiene la esencia de lo que a transcurrido, con la que sin ella desvanecerá en la secuencia de la evolución, la existencia y así desquiciar el escenario de desarrollo, con lo que el universo promoverá la redifinición de los elementos en dispersión para el continuo subsiguiente.

No es cierto que esté contemplado revolucionar el proceso de evolución, es y ha sido la creencia equivoca del hombre moderno al contemplar con éxito los proceso naturales que en ella se cumple, los átomos y ahora su sub divisiones, hasta así las partículas atómicas y sus identificaciones de pureza energética (anti materia).

Con lo que se deriva la ilusión de pretender hacer con el manejo equivoco de la creencia, la conceptualización de la visión para colocar nuestro destino en las manos de nuestra invención.

El Despertar está frente a nosotros desde finales del siglo pasado, las observaciones atómicas einstianas, poseen la lectura para indicarnos que así es, no es posible cambiar nada en el universo, solo nos está permitido es darnos cuenta de como y hacia donde va el proceso de evolución y con ello adaptarnos idealmente.