El Quinto Sol
Son las palabras que recogiera el candidato a la
presidencia de la república de Venezuela Henrique Caprile Randoski en esta y en
la pasada contienda electoral de octubre por la silla de Miraflores, en razón de expresar
mitológicamente; que el que manda no
está en este mundo terreno por lo que hay que esperar su pronunciamiento.
Esa interpretación sabia del joven candidato
presidencial con trayectoria administrativa en localidades y regiones del país,
como en el parlamento nacional, lo hace lucir hoy día como un connotado
político que puede orientar los destinos de la golpeada administración, a
caminos acertados para la preparación del progreso a que tanto hace referencia
en sus constantes alocuciones.
Porque al parecer el sentimiento que comenzó a
expresar la población nacional en la multitudinarias concentraciones de campaña
electoral, intrínsecamente dejan leer una motivación irreversible de llevarlo
abrumadoramente a la conducción del poder nacional.
El cual hace entender; que el heredero del líder fallecido
Hugo Chávez no encontró sintonía con la conexión emocional que vinculó a las
grandes mayorías venezolana con el axioma Socialismo del siglo XXI.
Desdibujando toda posibilidad de una reversión a lo
que hipotéticamente ocurrirá el 14 de abril del 2013 en las urnas electorales,
que se proponen entregarle el mando a Henrique Caprile Randoski para que en los próximos seis años, lleve a
cabo la aspiración frustrada en los 14 años, que tuvo en el poder, quien
falleció sin darle una dirección asertiva a la crisis económica, política y
social que recibió el gobierno en1998.
En tal sentido, se hace mágica la aseveración; que
la calma está en conocer la lectura de los tiempos de Dios.
Pero ojala, los que ahora tienen el compromiso de
entenderse con esos tiempos; hagan de ellos una reflexión que los lleve a
sabiamente aceptar, que se trata de un mandato divino, el reconocer qué el
camino terminó para dar paso a una ruta de mayor crecimiento social.
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